Una ley alineada con el ODS 13 Acción por el Clima de la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
En este mes de mayo, el pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado la Ley de Cambio Climático y Transición Energética de España. Ya puedes consultar en el BOE el texto completo.
Esta normativa presenta unos objetivos, tan ambiciosos como necesarios, como por ejemplo: reducción de gases de efecto invernadero en un 23% hasta 2030, desaparición de los vehículos de combustión en 2040 y que las energías renovables produzcan al menos el 42% del consumo de energía final en 2050.
Para llegar a este horizonte sostenible de mitad de siglo, la ley articula medidas concretas en torno a temas que nos incumben a todos: movilidad urbana sostenible, fiscalidad verde, publicación por parte de las empresas de su huella de carbono, fin de las explotaciones de combustibles fósiles y de la minería de uranio, condicionamiento de los proyectos de energías renovables a su despliegue en zonas de especial valor la biodiversidad, etc.
Además, en el capítulo de urbanismo, se regula la construcción para que los edificios sean más eficientes mediante el uso de materiales sostenibles y la introducción de energías renovables para los sistemas de calefacción y refrigeración. Y en la rehabilitación de edificios, el Gobierno facilitará el acceso a las energías renovables, con especial atención a las viviendas habitadas por personas en situación de vulnerabilidad.
En cuanto a planificación y gestión hidrológica, se incorporan medidas destinadas a la seguridad hídrica para las personas y para la protección de la biodiversidad ante los efectos del cambio climático.
Es una ley alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, concretamente con el ODS 13 Acción por el Clima. En Fundación Aon España hemos mostrado nuestra adhesión a este ODS en sucesivas ocasiones. Sin ir más lejos, el pasado mes de marzo nuestros voluntarios manifestaron su compromiso en la lucha con el cambio climático en un acto simbólico donde se plantaron 365 árboles autóctonos.
La acción por el clima es una lucha universal en la que otros muchos países ya se han implicado mediante normativas propias. En España, si bien la mayoría del parlamento ha dicho sí a la promulgación de la ley, varios grupos ecologistas y medios de comunicación la consideran “poco ambiciosa” ante los retos medioambientales que se deben abordar con urgencia.
Cambio climático y desastres naturales están estrechamente relacionados, según numerosos estudios.
Desde Fundación Aon España hemos debatido en muchos foros la vinculación existente entre el cambio climático y las catástrofes naturales. Hemos escuchado la voz de los expertos, hemos ido a los datos, al análisis, al intercambio de argumentos entre investigadores cualificados, buscando siempre la objetividad, y las conclusiones subrayan casi siempre esta relación causa-efecto: el cambio climático está detrás del incremento de los desastres naturales.
Ya no se trata de un fenómeno extraordinario. En los últimos 20 años, el número de desastres se ha duplicado y el 90% de ellos están relacionados con el cambio climático. La frecuencia e intensidad de fenómenos como huracanes, sequías e inundaciones, se está convirtiendo en la “nueva normalidad”, según Mami Mizutori, Representante Especial del Secretario General para la Reducción del Riesgo de Desastres de Naciones Unidas.
Los fenómenos meteorológicos extremos afectan a todos los países, ricos o pobres, pero son las personas en situación de pobreza quienes resultan más afectadas por el cambio climático. Y paradójicamente, son quienes menos han contribuido a alimentar esta crisis.
El planeta afronta una carrera contrarreloj para frenar el cambio climático y velar por la seguridad de las personas en situación de vulnerabilidad. Es el momento de actuar.