El Día Internacional del Pueblo Gitano se conmemora el 8 de abril. Esta fecha se debe al Primer Congreso Mundial romaní/gitano celebrado en Londres el 8 de abril de 1971, en el que se instituyeron tanto la bandera como el himno gitano, el “Gelem-Gelem”. En este congreso también se impulsaron y se consensuaron criterios de actuación para la recuperación, protección y difusión del Romaní, idioma que hablan 12 millones de personas en el mundo.
Los integrantes de esta comunidad celebran su día con una bonita ceremonia en la que las mujeres lanzan pétalos de flores en el río como símbolo del éxodo vivido y su libertad, mientras los hombres encienden velas en recuerdo de los familiares que ya fallecieron, especialmente de aquellos que sufrieron el holocausto nazi.
En este día, el pueblo gitano se hace más visible, alza su voz y sigue luchando por una integración plena en todas las instancias de la sociedad, pues por desgracia todavía es uno de los colectivos denominados “vulnerables”. En Europa constituye la minoría étnica más importante y numerosa, con más de 8 millones de personas.
El pueblo gitano supone un importante grupo de población en nuestro país, y aunque cuenta con una identidad cultural propia y bien diferenciada, tiene los mismos derechos que el resto de habitantes; desgraciadamente, existen aún situaciones que requieren la atención de los poderes públicos y de toda la sociedad para conseguir que puedan ejercer sus derechos en igualdad con el resto de los ciudadanos.
Son varios los planes o estrategias, tanto a nivel nacional como de comunidades o provincias, que favorecen la inclusión social de la población gitana en los ámbitos de educación, salud, empleo, vivienda, servicios sociales, participación social, cultura e igualdad. Así mismo, desde las instituciones públicas se sientan las bases para la igualdad de trato y la no discriminación.
Desde Fundación AON España estamos completamente convencidos de que deben erradicarse los estereotipos negativos asociados a esta comunidad puesto que tienen mucho que aportar a la cultura y otros estratos de la sociedad.