Como siempre decimos desde Fundación Aon, la discapacidad no debe ser un impedimento para disfrutar del ocio, de la cultura y del deporte y una de las actividades de nuestro país que une las tres es el Camino de Santiago.
El Camino de Santiago es una experiencia que debe ser para todos y, aunque en algunos tramos se necesite algo de ayuda, el tiempo ha demostrado que son muchas las personas con discapacidad que la han realizado y han disfrutado de ella intensamente. Esto sin olvidar que es conveniente viajar en compañía o en casos de problemas de movilidad, viajar con un coche de apoyo que pueda ayudar de manera puntual en algunos de los tramos.
Hay muchas guías en Internet que dan consejos y cuentan experiencias para personas con discapacidad, además de proponer tramos no demasiado largos ni complejos. Asimismo, ofrecen alternativas cuando la ruta es demasiado compleja para personas con movilidad reducida o discapacidad que pueda poner en peligro la seguridad del peregrino.
Una de las guías que más nos ha gustado por su completa explicación de todos los tramos es la realizada por Ibermutuamur. Si quieres consultarla, solo tienes que pulsar en este enlace. En cada etapa se hace una valoración general de la misma y se dan alternativas para personas con movilidad reducida. Además, se dan indicaciones sobre la accesibilidad del tramo y recomendaciones sobre alojamiento, sitios donde comer y lugares para visitar.
Otra de las guías que hay que tener en cuenta es la nueva versión de la aplicación ‘Camino de Santiago’ (disponible para Android e IOS) desarrollada por el Centro Nacional de Información Geográfica (CNIG), dependiente del Ministerio de Fomento, accesible para personas con discapacidad, gracias a un acuerdo suscrito entre el mencionado centro y Fundación ONCE.
Existen también muchas asociaciones, fundaciones y ONG que organizan viajes al Camino de Santiago especialmente dirigidas a personas con discapacidad y que hacen de esta experiencia un Camino lleno de solidaridad e inclusión.
