- Las empresas no aseguradas perdieron 1.220 millones de euros
- Las catástrofes provocaron una contracción del PIB de 1.900 millones
- Se perdieron 38.600 puestos de trabajo a causa de las catástrofes
El ejercicio 2023 no solo contempló cifras récord en los costes asegurados de las catástrofes, sino que también registró un impacto más duro de los siniestros sobre la economía nacional. Las empresas españolas dejaron de facturar 4.080 millones de euros debido a los siniestros catastróficos, un 53% más que en 2022 y un 27% más que en 2021, año en que se produjo la tormenta Filomena o la erupción del volcán de la isla de La Palma.
Según el Barómetro de Catástrofes 2023, presentado hoy en el IX Simposium del Observatorio de Catástrofes de la Fundación Aon España, celebrado bajo la Presidencia de Honor de S.M. el Rey en el Instituto de la Ingeniería de España en Madrid, las empresas afectadas por catástrofes naturales y no cubiertas por seguros perdieron 1.220 millones de euros en 2023, frente a 788 en 2022. Este impacto directo repercutió en el resto de los sectores, al suministrar 2.065 millones menos en productos a las empresas afectadas (efecto indirecto). La contracción por el impacto directo e indirecto indujo en la economía española una nueva pérdida agregada de casi 800 millones de euros.
La caída de la facturación de las empresas tuvo claras consecuencias para la economía: la contracción del PIB español rozó los 1.900 millones de euros, frente a la merma de 1.225 millones en 2022. El impacto sobre las empresas directamente afectadas y que carecían de seguro fue de 650 millones de euros, a los que hay que sumar 830 millones de euros de pérdidas en las empresas pertenecientes a la cadena de valor de las directamente afectadas (impacto indirecto), tanto aseguradas como no aseguradas. Las reducciones de las rentas empresariales y salariales derivadas de estos impactos supusieron un impacto inducido negativo superior a los 400 millones de euros.
Los sectores más afectados por la contracción del PIB fueron agricultura y pesca, que perdió 770 millones de euros (el 2,1% del peso de este sector en el PIB), seguido a mucha distancia del comercio, la industria agroalimentaria y el sector inmobiliario. El resto de los sectores se repartieron el resto de la pérdida, que fue de 600 millones.
A nivel de empleo, en 2023 se perdieron 38.600 puestos de trabajo en España a consecuencia de las catástrofes naturales, 13.400 más que en 2022 y 15.000 más que en 2021, de los que 15.900 se debieron a causas directas, 16.200 al impacto indirecto y 6.500 al inducido. El sector más afectado fue de nuevo el de agricultura y pesca, con más de 19.000 puestos de trabajo perdidos, seguido por el sector comercial con 7.000 puestos. El resto de los sectores agruparon un aumento del desempleo de casi 14.000 personas.