Las imágenes nos maravillan no sólo por lo que nos cuentan, sino también por cómo lo cuentan, es decir por su forma o estilo. Para disfrutarlas, hemos de mirarlas con curiosidad y atención (hay detalles significativos que no se ven a simple vista), pero también con imaginación para cubrir la información que hoy nos falta. Contemplando cuadros aprendemos infinidad de cosas y descubrimos nuestras inclinaciones, esto es, conformamos nuestro gusto, para ello sólo tenemos que formularnos una serie de preguntas clave.  

Dinámica: ¡Trabajo en equipo! Clases muy participativas en la que la profesora conduce la atención de los jóvenes, sus comentarios, para ayudarles a valorar su intuición y a extraer conclusiones.

Profesora: Anna Reuter